Alternativa Republicana
Alternativa Republicana nace de la convergencia de varios partidos y ciudadanos, procedentes de distintas ramas de la tradición histórica del republicanismo de izquierdas en España así como de los nuevos republicanos, que compartimos la necesidad de una fuerza política que sea referente republicana y de izquierdas.
Alternativa Republicana se define como un partido de izquierdas, democrático, republicano, radical, laico, federalista y ecologista. Alternativa Republicana tiene como objetivos fundamentales la instauración pacífica de la República Federal en España como modelo democrático de convivencia, la consecución de un modelo de desarrollo económico justo, equilibrado y sostenible en defensa de los intereses de la ciudadanía, mediante un uso racional de los recursos naturales y la defensa de los derechos humanos en su acción política, y la construcción de una sociedad libre e igualitaria basada en los valores republicanos de Libertad, Igualdad y Fraternidad, así como una democracia radical de mayor calidad basada en la implicación, control y participación de la ciudadanía en la vida pública.
Desde Alternativa Republicana asumimos los siguientes puntos básicos:
1. La necesidad de una ruptura total con el sistema político monárquico instaurado en España como herencia de la dictadura impuesta por los vencedores de la guerra civil y de la recuperación de la dignidad democrática perdida en forma de una III República basada en valores de Libertad, Igualdad y Fraternidad.
2. La necesidad de una República cuya forma sea Federal en consonancia con la pluralidad de los distintos pueblos ibéricos, que consagre como valores comunes la riqueza y diversidad de culturas, lenguas e identidades que la componen, reconociendo asimismo un ejercicio democrático del derecho de autodeterminación de los pueblos.
3. La necesidad de una profunda regeneración del sistema político para una democracia de mayor calidad y participación ciudadana, basada en la radicalidad democrática y las medidas que la favorezcan (proporcionalidad del parlamento, listas abiertas, elección de alcaldes y presidentes a doble vuelta, métodos de control exhaustivos de los cargos públicos, etc.).
4. Es imperativo un cambio de modelo económico que supere al capitalismo como sistema económico y social, un sistema que garantice los derechos básicos y reduzca las desigualdades e injusticias sociales que imperan en la actualidad. El modelo económico de nuestra república garantizará la titularidad pública de los sectores estratégicos. Consideramos irrenunciable la defensa y mejora de los servicios públicos, la creación de una banca pública, la imposición sobre las transacciones financieras internacionales especulativas y la desaparición de los paraísos fiscales. La sostenibilidad del planeta es el marco que hay que asumir inevitablemente para configurar el nuevo modelo económico.
5. La fundamental necesidad de extirpar de este país los privilegios clericales y el poder de la iglesia y sus organizaciones afines, que desde la dictadura parasitan nuestra hacienda, nuestra educación y nuestra vida pública. Respetando la libertad de culto, la separación definitiva de la Iglesia y el Estado, y el laicismo serán señas de identidad de nuestro modelo de República.